Aceptémoslo, con defectos o no, FIFA, de Electronic Arts, es el mejor simulador de fútbol que existe. Yo también he encontrado decenas de errores que lo hacen alejarse cada vez más de la perfección, pero comparado con los rivales que ha tenido durante los años, ha mantenido una constante mejora, aunque no tan notoria, pero que nos hace comprarlo para echar retas en esas reuniones que terminan en la madrugada. Es el juego deportivo más vendido, el más exitoso, y con la mayor cantidad de licencias de jugadores, equipos y selecciones. Y con todo esto, aún hay detalles que quisiéramos ver, pero que probablemente nunca haremos. Pero soñar no cuesta nada.

Según la “física perfecta” del FIFA, las faltas son legales todas, y no hay cómo salvarse de que no se marquen. De aquí desprendemos varias características, y una de ellas es fingir esas faltas. Aún tenemos los mexicanos bien abierta la herida del mundial y nuestra eliminación por una falta que al parecer no existía, y qué mejor manera que rendir tributo a estos actores de las canchas, que con la función de fingir y aventarse semejantes clavados para tratar de engañar al árbitro. Sé que no es algo que entre en el juego limpio, pero cada vez queremos más realismo ¿no?

Necesitamos árbitros humanos, que estén a la par de los jugadores y su famosa inteligencia artificial. Por lo tanto propongo que haya un margen de error para el momento en que aprecian una falta, fuera de lugar, o cuando sale el balón, incluso para señalar un tiro de esquina que no era. Sería bueno eliminar el factor de la exactitud con la computadora, y dejar más espacio a los errores humanos.

“Hijo de tu tal por cual” es solo un maquillaje a lo que cualquier jugador le gritaría al árbitro por señalar mal algo, o simplemente marcar una falta cuando el futbolista no reconoce lo que hizo. Entonces requerimos urgentemente un botón de reclamo, insulto o corte de manga, para ponerle más sabor al juego, y jugarse una tarjeta amarilla o ya siendo más avanzados, ir mermando las decisiones futuras del colegiado, para agregarle más factor humano.

¿Sería mucho pedir violencia en las gradas? Ok, sí lo sería, pero a nadie le afectaría que el público se metiera más en el juego, donde reclame las decisiones arbitrales, abuchee al equipo contrario de manera más intensa, pidan a jugadores para que entren, hagan rechiflas para los jugadores contrarios que hayan jugado en el equipo al que la afición apoya, y ese tipo de cuestiones que hacen más divertido un juego, viéndolo desde la tribuna. Podrían incluso agregar el ya famoso e internacional grito muy mexicano, ese que escuchamos en un saque del portero contrario.

Imaginen conmigo esto: partidos amañados por la federación. Río mucho al pensar en esto, pero sería bueno remar contra corriente en un partido contra el equipo sede del torneo, o uno que tenga mucho dinero para comprar árbitros. Sabemos que la organización FIFA promueve el juego limpio, pero siendo muy honestos, a veces dista mucho de ser así, por lo que no estaría tan mal esta función.

¿Por qué no agregar a esas personas que se meten al campo a defender alguna labor social? Esos intrépidos que entran al juego para salir en televisión mundial y que todos vean que hay que salvar a la foca o al venado de cola blanca. O de plano se pasaron de caguamas y quieren ir a saludar a su jugador favorito, pero necesitamos esta función con todo y policías que los tacleen como en el fútbol americano, o de lo contrario ni chiste tiene.

Requerimos, y sobre todo en la liga mexicana, que el respetable aviente vasos de cerveza –vacíos o no- al jugador contrario cuando haya un tiro de esquina. Si se puede, también hielos y botellas que hayan entrado de contrabando.Otra cosa que he pensado, es darle más fuerza a los personajes que de repente nos encontramos en el público, tales como el clásico que llora al perder su equipo, las chicas guapas que nos deleitan la pupila con sus formas, el señor que aburrido prefiere dormirse, o los que van en pareja con playeras diferentes. Quizá sería bueno, o no.

Debería de existir una función donde piquemos los ojos, o para morder al rival –está de moda-, jalemos la playera, el short, agarrar de los pelos, cometer falta en el área cuando hay un tiro de esquina, adelantar la barrera en los tiros libres, patear el balón cuando hay falta y perder más tiempo. En fin, toda clase de artilugios que no nos gusta ver en el partido, pero que le ponen ese toque fastidioso que todos los jugadores usan en el terreno de juego.

Sé que muchas de estas cosas harían un juego menos limpio, pero como les comento, lo que buscamos es realismo en el juego, y todo esto viene a aportar más de eso que queremos. Chapuzas o no, son parte del deporte, y no sólo del fútbol, sino de otros más. Debemos siempre promover que se juegue sin trampas ni engaños, pero con una buena programación, se puede lograr que uno como gamer deje de usar esos trucos, y así aprender que el fútbol debe de ser puro. Me encanta el fútbol, me encanta el FIFA, pero aceptemos que estos detalles le darían un plus enorme a la experiencia, que es lo que todos buscamos.

¿Creen que se me pasó algo? Comenten entonces por favor, sus opiniones me interesan para armar una buena discusión.

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