Mimic: Voces del más allá | Crítica

“Cuando oyes las voces de gente muerta, él está cerca”

El monte Jangsang esconde un secreto… se dice que una tenebrosa criatura de largo cabello blanco acecha en el bosque, llamándote a veces como un grito, como una corriente de agua y en ocasiones, con las voces de las personas que amas.

Mimic: Voces del más allá originalmente titulada 장산범(Jangsanbeom) o “El tigre de Jangsang” se trata de la segunda entrega cinematográfica del director de origen surcoreano, Jung Huh. Quien alcanzó reconocimiento con el film “Hide and Seek”. La película, que combina los géneros de terror y drama, recoge la leyenda proveniente de Busan de un tigre que vive en el bosque. El guión estuvo a cargo de él mismo y cuenta con las estrellas coreanas: Yum Jung-ah, Park Hyuk-kwon, Heo Jin y Shin Rin-ah.

La trama gira alrededor de una familia cuyo hijo mayor se encuentra desaparecido desde hace años, después de probarlo todo deciden cambiar de residencia a la ciudad natal de la abuela paterna del menor, en espera de que su salud mental mejore y pueda darles una pista que les ayude a dar con su pequeño. Pronto, se darán cuenta que el bosque no es un lugar seguro, sin embargo, el hallazgo de una niña aparentemente perdida en el monte los llevará a comprender que ella no es lo que parece y están cayendo en la trampa de una misteriosa criatura.

Yum Jung-ah, a quien recordarán por su impresionante performance en la cinta de terror coreana “A tale of two sisters” interpreta a Hee-yeon, una madre de familia a quien la pérdida de su primer hijo le hace sentir cada vez más desorientada. Park Hyuk-kwon actúa como Min-ho, un veterinario que es dueño de una pensión para perros, padre de familia dedicado y esposo de Hee-yeon, quien se esfuerza por mantener la cabeza fría ante los extraños sucesos. La experimentada actriz, Heo Jin es Soon-ja, la madre de Min-ho quien padece demencia senil, ella conoce la leyenda del Tigre pero es incapaz de separar la ficción de la realidad, finalmente la joven talento Shin Rin-ah, aparece en el papel estelar de la cinta como una misteriosa pequeña que se dedica a vagar en el bosque.

La cinta comienza de forma muy intensa, en una oscura carretera dos personas irrumpen en una cueva que se encuentra sellada con la intención de esconder un cadáver, sin embargo los amuletos en la entrada presagian que éste no es un sitio normal y abrir la cueva puede tener consecuencias fatales. Siendo la primera secuencia de escenas tan bien logradas en cuestión de la fotografía y el manejo de la tensión, es de esperar que el resto del film mantenga el mismo ritmo, sin embargo, nos encontramos ante una obra que a lo largo de sus 100 minutos de duración tendrá una suerte de altos y bajos que pueden llegar a cansar al espectador.

Los fanáticos del terror del sudeste asiático encontrarán en la película diversos elementos que les serán familiares, como los amuletos que recién mencioné, el uso de las campanillas de viento para ahuyentar a los malos espíritus, el joven detective y la siempre útil médium del pueblo, quien se encargará de alertar a la familia y explicar la leyenda.

El problema, en mi opinión, radica en que algunas cosas se dejaron a medias, imposibilitando a este largometraje de alcanzar lo máximo de su potencial. La cinta juega mucho con la idea del Tigre, su largo cabello blanco puede encontrarse en los diferentes escenarios en que sucede la acción aún y cuando los personajes no siempre lo noten, el leve rugido que acompaña a algunas escenas y la espectacular actuación de la joven Shin Rin-ah combinado con la explotación de miedos comunes como los espejos y los espectros que imitan voces humanas, se ven entorpecidos por una trama irregular, que a veces es demasiado tranquila y otras demasiado cruda. Además de que en cierto momento puede rayar en el absurdo.

Considero que se queda un tanto corta para las películas de su género, pero es una muy buena opción de entretenimiento. Si eres fanático del cine de terror asiático, entonces no pierdas la oportunidad de ver “Mimic: voces del más allá” en tu cine favorito a partir del 27 de abril.

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