Cómo entrenar a tu dragón 3: El mundo perdido | Crítica

La saga de “Cómo entrenar a mi dragón” fue un digno contendiente de Pixar en los Oscar, pero algo que marcó la diferencia desde su primera entrega, es la seriedad con la que se tratan varios temas como la superación al fracaso, o la pérdida de un ser amado. Además de esto, Universal y Dreamworks nos presentaron a Chimuelo, un protagonista que no tiene diálogos, pero aún así es capaz de demostrar ternura, compasión, fiereza y liderazgo al mismo tiempo.

A diferencia de las dos primeras entregas “Cómo entrenar a mi dragón” (2010) y “Cómo entrenar a mi dragón 2” (2014), donde Hipo (voz en español latino – Eleazar Gómez) y Chimuelo siempre trabajan como un equipo inseparable, ahora en “Cómo entrenar a mi dragón 3”, estos dos grandes héroes nórdicos deberán llegar a un acuerdo respecto a su futuro, en esta nueva utopía de dragones y humanos.

El director Dean DeBlois las a tenido todas de ganar desde el inicio de esta trilogía, continuando hasta la fecha con un enfoque divertido y familiar, pero con un serio mensaje en el fondo. Algo bastante importante en esta saga, es el continuo crecimiento de los personajes, y no solo en su apariencia física, sino en su madurez emocional, incluyendo a Chimuelo. Ahora, nuestro escamoso amigo experimentará el romance, pasando por sus fases de cortejo hasta el heroico rescate.

Ha pasado un año desde la derrota de Drago, cazador de dragones (Como entrenar a mi dragón 2), y tras la muerte de Estoico el Vasto, el Jefe Hipo ha trasformado y adaptado su aldea vikinga, Berk, en un paraíso para los dragones desolados o que han sido cazados. Hipo, sus amigos y su madre Valka (voz en español latino – Rebeca Patiño) han formado un grupo de rescate de dragones, intentando frustrar los secuestros y ataques de los distintos cazadores de dragones alrededor de la zona.

Siendo un día cualquiera, Chimuelo comienza a percibir un peculiar olor, cuando inesperadamente él e Hipo se encuentran con una dragona hembra muy parecida a la raza de Chimuelo, Furia Nocturna. Para fines prácticos, Hipo y Astrid (voz en español latino – Leyla Rangel) la nombran Furia Luminosa, por su hermoso color blanco perla. Este encuentro da paso a una de las escenas de cortejo más divertidas y mejor animadas que puede existir en la historia del cine animado por computadora. Siguiendo los consejos de Hipo, Chimuelo hace distintos bailes, saltos, gestos y formas de vuelo, con tal de impresionar a su amada.

Pasando a temas más serios (y que me encanta como lo manejan en esta película) por un lado tenemos a Chimuelo, quien, tras conocer a la Furia Luminosa, siente un fuerte llamado a su lado salvaje y libre; por el otro, el Jefe Hipo debe tomar severas decisiones para el pueblo de Berk ya que se enfrenta con una sobrepoblación de dragones, así como cuidar su relación con su candidata a reina Astrid. Este conjunto de acciones lleva a que Hipo decida que lo mejor para la aldea es mudar todo Berk hacia el Mundo Oculto, un lugar de leyenda donde habitan todos los dragones sanos y salvos. Por si esta situación no fuera ya lo suficientemente delicada, el experto y muy temido cazador de dragones, Grimmel (voz en español latino – Ricardo Tejedo), ha dedicado su vida a exterminar a la raza de los Furia Nocturnas, poniéndose como objetivo eliminar a Chimuelo utilizando a la Furia Luminosa como carnada.

Un pequeño paréntesis que me gustaría mencionar es que el personaje de Astrid sirve como incondicional apoyo hacia Hipo en todo momento, lo ayuda a enfrentar la situación de Chimuelo y su pareja, así como de embarcarse a buscar un mejor mundo para los pobladores de Berk y los dragones, así como fortalecer su relación amorosa. Sin embargo, Astrid como tal se siente un poco descuidada en su crecimiento, sigue siendo dura de carácter, pero valiente y audaz en combate, pero fuera de eso, no vemos gran cambio en ella. Con miedo a equivocarme, esto se puede sentir ya que desde la primera entrega de “Como entrenar a mi dragón” siempre fue una valiente y madura vikinga.

“Cómo entrenar a mi dragón 3” nunca se ha alejado de una “violencia ruda” digna de vikingos. Si bien su objetivo es el pacifismo y la liberación del pueblo y de los dragones, siempre un recurso es el combate directo, no violento ni gore, pero si explícito. Pese a esto, durante el transcurso de la cinta, cada momento de acción o combate, es opacado de manera positiva por una serie de pura y familiar comedia entre los protagonistas y sus amigos Patán Mocoso (voz en español latino – Héctor Emmanuel Gómez), Patapez (voz en español latino – Ricardo Bautista), Brutacio Tortón (voz en español latino – Carlo Vázquez), Brutilda Tortón (voz en español latino – Karla Falcón), Bocón el Rudo (voz en español latino – Héctor Lee) y Eret (voz en español latino – Gabriel Basurto), haciendo que cada personaje tenga su momento de brillar de una forma orgánica y divertida.

“Cómo entrenar a mi dragón 3” nos enseña a chicos y grandes el poderoso mensaje de lo que el amor y la amistad en realidad representan. Hipo y Chimuelo deben vivir sus vidas, y aprender de los sacrificios necesarios para ser líderes de sus respectivas especies. “Como entrenar a tu dragón 3” es el perfecto final de una increíble trilogía. No solo presentando el fin de la saga, sino una explicación lógica para los más pequeñitos del porque no vemos dragones volando por ahí. Desde su debut en 2010, tuvieron que pasar 4 años para ver a los dragones Alfa y entender cómo funcionaba el mundo dragón. Ahora, después de 5 años más, y sin arrepentirnos de la espera, se pone un “fin” a este mundo de una forma espectacular.

Compartir en: